Texto y fotografías: Luis Felipe Hernández Beltrán
Motonetas, motocicletas, ropa, vinos y otras bebidas alcohólicas, chocolates, dulces, gelatos… De esos productos y otros tantos más, puede presumir Italia en México y en todo el mundo.
Y es que toda esa gama de mercados, engalanaron, ya sea a través de stands, edecanes, degustaciones o fotomontajes, la reciente celebración en México por el 76 aniversario de la República Italiana que se llevó a cabo en el Instituto Italiano de Cultura de la Ciudad de México, lugar al que llegaron alrededor de mil invitados que fueron recibidos por Luigi de Chiara, Embajador de Italia en México.
“En estos tiempos difíciles no nos hemos quedado con las manos en las bolsas, tengo que decir que aquí en México hemos tenido varias iniciativas de colaboración desde la Embajada y las otras instituciones italianas en México y tengo que reconocer que la Embajada de Italia en México ha creado nuevos canales de colaboración entre Italia y México para satisfacer la demanda de productos de Italia a México y de México a Italia”, expresó el Embajador de Chiara durante su discurso.
Además de solidarizarse, a nombre de su país, con Ucrania por la guerra que esta nación ha tenido con la Federación de Rusia, el diplomático anunció la pronta creación de una Cámara Mexicana de Comercio en Italia y remarcó la campaña virtual “Be It (Ser Italia)” que realiza el Ministerio de Asuntos Exteriores de Italia en 26 países, entre ellos México, para promover el Made In Italy.
Por su parte, Bernardo Aguilar Calvo, director para Europa de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) del Gobierno de México, destacó que además del 76 aniversario de la independencia de Italia, esta patria celebra el 73 aniversario del inicio de restablecimiento de relaciones diplomáticas entre México e Italia. “Se mantienen en excelentes términos y yo les podría decir en este momento que son términos inmejorables”, dijo.
La Fiesta Nacional de Italia, que tuvo como amenización a un cuarteto de cuerdas que tocaron los Himnos Nacionales de México e Italia, culminó con el ofrecimiento de platillos tradicionales de la gastronomía ítala como pastas y otras delicias.
