Texto y fotografías: Luis Felipe Hernández Beltrán

Dos, fueron las razones a las que poco más de 150 personas, entre diplomáticos acreditados en México, políticos mexicanos, la comunidad filipina radicada en México y otros invitados especiales, acudieron, recientemente, a un salón del Club Naval de la Ciudad de México.

Primeramente, a celebrar el 124 aniversario de la Proclamación de la Independencia de Filipinas, y segundo, para despedirse de Remedio Tuason Remedios, quien durante poco más de cuatro años fue el embajador de ese país asiático en México.

“Los cuatro años de mi mandato han sido realmente memorables. Tuve la suerte suficiente para conocerlos a todos. Tuve la oportunidad de viajar a la mayoría de los países bajo la jurisdicción de nuestra Embajada, y lo más importante: tuve el honor de servir a mi país en foros bilaterales y multilaterales”, expresó emotivamente el Embajador Tuason durante su discurso.

El evento, sirvió también para reconocer a los señores Luis Guzmán y Horacio Castillejos, dos de los tres últimos sobrevivientes del legendario Escuadrón 201, a quienes Filipinas le vive agradecido por aliarse a ellos en 1946 durante la Segunda Guerra Mundial. Los militares en retiro obsequiaron al Embajador Tuason y su esposa un libro sobre la historia de la Fuerza Aérea Mexicana, así como algunos parches con insignias de sus hazañas.

El festejo contó con la participación de un grupo de artistas filipinos, quienes, además de sus coloridas vestimentas típicas de la nación celebrante, ofrecieron un poco de arte y cultura filipina, a través de danzas y cantos; así como la degustación de bocadillos tradicionales filipinos.

Mientras el Gobierno de Filipinas anuncia al nuevo Embajador, la embajada de esa patria en México estará dirigida por John G. Reyes, encargado de Negocios y Asuntos Internacionales.